DE "MI VIDA, ¿POR QUÉ NO TE MUERES...!".

CON "M" DE  MUERTE ¿Debe una esposa infiel pagar tan caro su "pecado"...?

DIAL “M” FOR MURDER (Con "M" de muerte/ La llamada fatal). EU, 1954. Dir. Alfred Hitchcock.
Durante un apacible desayuno en casa, en el periódico, Margot Wendice (Grace Kelly, en su primera película con Hitchcock) se entera de la llegada del "Queen Mary"; allí viene su  amante, el famoso escritor Mark Halliday (Robert Cummings, que tenía un affaire con Miss Kelly en ese momento de la vida real), quien es nada menos que el amor de su vida.
Resulta que ya instalado en la ciudad, Mark el escritor, quien es amigo de la familia Wendice, decide  visitarlos.  Todos fingen demencia. Pero la bellísima y cínica rubia con carita de “yo no fuí” no sabe que su marido, Tony Wendice (Ray Milland, haciendo una verdadera creación del perfecto marido en gigoló) mucho tiempo atrás ha descubierto que ella siempre le ha sido infiel. 

Ofendido su amor propio, que es mucho más que el que profesa por su señora, ―y sobre todo, temiendo perder sus privilegios de cónyuge de una mujer rica―, Wendice  planea matarla.  Pero prefiere que alguien más la asesine. Así se vengará y podrá heredar una cuantiosa fortuna. Llegada la noche del crimen, Wendice se lleva a cenar  a Mark a un club exclusivo para caballeros,  para  que  no  sospeche. El  esposo engañado lo sabe todo,  pero tiene  que  disimular. 

Otra vez, un argumento policíaco de gran tensión dramática, filmado y actuado con los altos estándares del “Maestro del suspenso”. Grace Kelly está increiblemente bien. Milland ni se diga, y John Williams, el inspector de policía, es un verdadero "bombón". Emocionante y fabulosa. ***

¡Corte  y  queda...!

March de Malcriado