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| A la derecha el ama de llaves más siniestra del cine. |
REBECCA (Rebeca). EU, 1940. Dir Alfred Hitchcock.
O DE UNA BRUJA EN EL CASTILLO
Sir Laurence Olivier, a su máximo, como el archimillonario y excéntrico Maximillian de Winter, seduce a una jovencita ingenua y medio bobalicona (Joan Fontaine) que funge como dama de compañía de una adinerada dama de sociedad que pasa unas vacaciones en Montecarlo. La joven, muy deslumbrada, acepta casarse al vapor y sin mayor protocolo con el que cree que es "el hombre perfecto". Sin embargo, en el castillo Manderlay, donde los recién casados vivirán su singular historia de amor, existe un secreto que está muy bien salvaguardado por la siniestra ama de llaves.
Allí está Mrs. Danvers (Judith Anderson), que obsesivamente fiel a sus deberes ―y a otras cosas―, le hará la vida bastante difícil a la nueva señora de Winters, a quien considera una ñoña advenediza que no está a la altura del cerrado mundo doméstico que ella misma maneja; ante la indiferente mirada del verdadero dueño del imperio.
Un renombrado y apabullante melodrama, ya clásico, con un desenlace muy al estilo hitchcockiano, naturalmente. De once nominaciones al Óscar, solamente obtuvo 2: mejor fotografía y mejor película. Cosas de la Academia. Sencillamente asombrosa. ****
¡Corte y queda...!
O DE UNA BRUJA EN EL CASTILLO
Sir Laurence Olivier, a su máximo, como el archimillonario y excéntrico Maximillian de Winter, seduce a una jovencita ingenua y medio bobalicona (Joan Fontaine) que funge como dama de compañía de una adinerada dama de sociedad que pasa unas vacaciones en Montecarlo. La joven, muy deslumbrada, acepta casarse al vapor y sin mayor protocolo con el que cree que es "el hombre perfecto". Sin embargo, en el castillo Manderlay, donde los recién casados vivirán su singular historia de amor, existe un secreto que está muy bien salvaguardado por la siniestra ama de llaves.
Allí está Mrs. Danvers (Judith Anderson), que obsesivamente fiel a sus deberes ―y a otras cosas―, le hará la vida bastante difícil a la nueva señora de Winters, a quien considera una ñoña advenediza que no está a la altura del cerrado mundo doméstico que ella misma maneja; ante la indiferente mirada del verdadero dueño del imperio.
Un renombrado y apabullante melodrama, ya clásico, con un desenlace muy al estilo hitchcockiano, naturalmente. De once nominaciones al Óscar, solamente obtuvo 2: mejor fotografía y mejor película. Cosas de la Academia. Sencillamente asombrosa. ****
¡Corte y queda...!
March de Malcriado
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