viernes, 7 de febrero de 2025

LA VENIDA DEL SEÑOR

 

LA VENIDA DEL SEÑOR Una exposición que rompe con lo establecido. © UNAM/ Academia de San Carlos


DE “LA VENIDA DEL SEÑOR” EN LA ALTA CLERECÍA: ¿O SUS BAJOS INSTINTOS?


Por vez primera escribo aquí sobre pintura y un poco de fotografía. Los artistas occidentales siempre han interpretado, y resignificado, a su muy particular manera y estilo todos los aspectos de la cultura. En este caso trataremos de acercarnos a ciertas visiones sobre algunos símbolos y actos religiosos de la Iglesia Católica y Romana 
representados en el arte disidente.


ANTECEDENTES (Sólo unos cuantos)

Gramsci decía de la Iglesia que no era otra cosa que uno de los aparatos ideológicos del Estado (para someter y controlar a la población). Seamos creyentes o no, sabemos que las instituciones siempre tienen, como todo en la vida, dos lados totalmente opuestos, y cada quién los verá según su criterio y su propia perspectiva.

Cine
En el cine tenemos el claro ejemplo del realizador Luis Buñuel, que desde siempre se dedicó a criticar el sistema desde todos los ángulos posibles. La Iglesia, por supuesto, no se salvó. Nada más ver algunas de sus obras maestras: Él (con el inconmensurable Arturo de Córdova), Nazarín, Viridiana, Simón del desierto: “Mira Simón, qué piernas tan inocentes…” con la Pinal (como el Diablo) más bella y seductora que nunca.

De best-sellers
En literatura, más bien en el mundo de los best-sellers, El código Da Vinci y Ángeles y demonios de Dan Brown han tenido tanto éxito que fueron llevadas al cine. Conozco gente que sin nunca haberlas leído ni visto consideraba a estas obras como sacrílegas, un verdadero atentado a las creencias y a la fe de la grey católica. Sin embargo, regresando en el tiempo, creo que estas películas no fueron tan polémicas como La última tentación de Cristo (Martin Scorsese, 1988). Recuerdo que fue tan provocativa que estando en Nueva York me impresionó ver la fila tan larga que había en la taquilla del cine donde se exhibía aquel verano hace 37 años.

Pintura
En pintura, aunque no son Raffaello, El Greco o Caravaggio, Dalí y Roberto Ferri han hecho representaciones crísticas muy bellas y de primera magnitud. Sin embargo, y para continuar dentro del tema de lo disruptivo, también en el arte pictórico hay transgresiones al tema religioso en abundancia, aunque muchas de ellas recurren a los clichés de siempre.


DE FOTOS ATREVIDAS

En cuanto a la fotografía, Bruce LaBruce expuso “Obscenity” en Madrid en la primavera de 2012. La temática también giraba sobre unos personajes religiosos y santos expuestos de una manera que el público y la crítica consideraron que era bastante perturbadora, blasfema y por supuesto “obscena”. Tanto así que la galería La Fresh Gallery fue objeto de críticas destructivas y actos vandálicos por parte de grupos ultra conservadores para que la exhibición fuera cerrada. 


OBSCENITY Una colección del artista y cineasta canadiense Bruce LaBruce que gustó, pero que también incomodó y hasta “horrorizó” a grupos reaccionarios que arrojaron bombas molotov a la galería.  © Bruce LaBruce/ Galería La Fresh


Lo sorprendente es que la misma muestra fue presentada 2 años después en la Universidad de Guadalajara, Jalisco, en el marco del Festival Internacional de Cine de GDL. Un ejemplo fue la imagen de la artista transexual Topacio Fresh como presbítero rubio con los senos al aire; otra fue su propia versión de La piedad de Miguel Ángel con la cantante Alaska como la virgen y Mario Vaquerizo como Jesús. No bueno…

La fotografía más fuerte, según mi criterio, es el retrato de un sacerdote con la cara llena de semen, pero luego hay una toma más explícita de medio cuerpo donde se ven claramente sus genitales.


FABIÁN CHÁIREZ

FABIÁN CHÁIREZ Con su particular cara de "éxtasis" siempre es sencillo y muy atento con sus admiradores, siempre dispuesto a dar autógrafos y a posar para selfies o retratos. © Foto-MarcH



El artista plástico mexicano Fabián Chairez (1987) es ya un consagrado de la pintura que ha expuesto su aguda crítica a las “masculinidades hegemónicas”, ya en Bellas Artes, ya en El Museo de Arte Moderno (y en muchos lugares más, inclusive en el extranjero). Ahora en la Academia de San Carlos de la Ciudad de México presenta “La venida del Señor”. Con su estilo realista, casi hiperrealista y muy audaz, retrata su visión del mundo clerical desde una postura muy vanguardista, y altamente transgresora dirían muchos.


De machirulos y hembristas
A gran parte de la sociedad mexicana tan “machirula” y “hembrista”, tan tradicional y católica, esta temática de los clérigos como entes sensuales ꟷsexuados, lascivos, más allá de los bordes de la lujuria; como sacerdotes totalmente entregados a la concupiscenciaꟷ, le parece obscena, muy agresiva e inmoral. Ése es precisamente el nicho en el que el artista plástico Cháirez circunscribe y desarrolla su “escandalosa” obra. Aunque yo no llamaría escandalosa a ninguna producción artística, lo que no obsta para que la reacción del público sí pudiera ser la de escandalizarse. Si bien, jamás llevaría a mi tía Remilgos a ver semejante muestra. Lo verdaderamente escandaloso son otros hechos sociopolíticos, económicos y criminales que sí afectan directa y definitivamente a la población.


Obra
Visualmente, dos padres lamiendo un enorme cirio pascual alfa y omega como alegoría de un acto de adoración fálica es muy impactante, pero sin duda muy sexy. La belleza de sus lienzos funde a plena luz y en rojo litúrgico, lo celestial con lo carnal.

Todos los cuadros expuestos allí son de naturaleza religiosa interpretados de una forma absolutamente audaz. Ésa es la expresión artística de un verdadero provocador. En las obras de Cháirez sólo hay belleza, claro, una belleza que a veces es dolorosa y que rompe con los cánones establecidos, pero que no por ello es menos cierta; yo conozco varias historias sobre sacerdotes y pastores que es mejor mantener ocultas... Creo que la heteronormatividad está en plenas vías de extinción. Los hombres y las mujeres de Dios, dedicados a la religión,  para muchos pueden llegar a ser símbolos sexuales con resonancias de fetiche y hasta de parafilias… Para entenderlo quizá entonces habría que leer un poco a Freud, o simplemente leer más. Los libros del Marqués de Sade son un claro ejemplo de lo "proscrito", porque él tenía familiares profesionales de la religión y también sabía cada cosa... ¡Ah, y ver cine, mucho cine!, sobre todo el de Pasolini.


DEL HOMOEROTISMO

El homoerotismo no es nada nuevo, existe en las representaciones artísticas de la prehistoria y mucho más a partir del impresionante legado del arte helenístico. ¿Se acuerdan del Apolo de Farnesio o el de Belvedere?, ese mismo que todo encueradito está en pleno en uno de los museos de El Vaticano. Por otro lado, inclusive casi todas las representaciones sacras del Martirio de San Sebastián muestran a un hombre de hermosura en demasía, tanto que a muchos sádicos y masoquistas les parecerá sublime e inspirador. Así que ver a hombres abandonados al éxtasis, igualitos (o casi) que en el Éxtasis de Santa Teresa de Bernini, que es una de las esculturas más atrevidas de la historia del arte, o su versión pictórica cubista realizada por Tamara de Lempicka, es todo un deleite.

Fabián Cháirez tiene su propia versión: El éxtasis, un óleo sobre lienzo de 2018 que es una maravilla.


LA VENIDA DEL SEÑOR Hacía mucho que no se veía un tumulto tan espectacular para entrar a ver una exposición. © Foto-MarcH


Cháirez no es un hereje. La herejía realmente no existe, sólo fue un invento de la Iglesia para combatir y exterminar a los que se atrevían a disentir, a cuestionarse, a usar su propia mente para explicarse las influencias y las estructuras del Ser. 

Actualmente, Fabián Cháirez es el sumo sacerdote del arte transgresor que pone ante los ojos arrobados de su público joven y moderno una colección maravillosa y única en el mundo. Cosa que Julio Galán no logró en vida, en su momento, por las barreras culturales y los prejuicios de la época. Ser “diverso” estaba muy pero muy mal visto. Así que asumirse como tal era un reto que no muchos podían enfrentar. Este chico, más bien el grandísimo Mtro. Cháirez, es la nueva súper estrella del arte, sobre todo del arte disidente. Desde Picasso o Warhol no se había visto nada semejante. Su famoso aforismo: “Me encanta provocar con mi obra” es una realidad, casi un mantra.

MarcH de Malcriado

martes, 4 de febrero de 2025

EMILIA PÉREZ

 

EMILIA PÉREZ La polémica y detestada película francesa que pone a México como el reino de la delincuencia total… ¿Será? © Page114/ France 2 Cinéma/ Pathé Films/ Saint Laurent Productions/ Netflix



EMILIA PÉREZ (Francia-Bélgica, 2024. Dir. Jacques Audiard).

A nosotros, los espectadores mexicanos, tan inmersos en la tragedia, el crimen organizadísimo, las desapariciones forzadas, los secuestros exprés y el baño de sangre cotidiano, no nos gustará jamás que se haya hecho de todo eso un divertimento musical. Por si fuera poco, esta temática tan actual como realista fue llevada al género menos realista posible, el cine musical la-la-lááá. Así que la película gala Emilia Pérez es todo un shock para los espectadores de una nación tan lastimada social y psíquicamente. No así para el público internacional.

Lo peor es que este filme fue ideado, escrito (sobre una obra adaptada de Écoute de Boris Razon) y dirigido por un cineasta francés que considera que el español es un idioma modesto, de naciones subdesarrolladas y de inmigrantes… ¡O sea jelóuh…! En el fondo yo creo que este señor es un mexicanófilo latente o un mexicofóbico de clóset, cosa que honestamente no nos importa. El caso es que para bien o para mal puso a México en el universo de las películas a nivel mundial; y nadie ignora cómo está el tejido social-delincuencial aquí  porque las noticias lo reportan a diario. Por cierto, el panorama no es peor que el que hay en Rusia, España, Italia, EE.UU., y hasta en la même France… ¿Sí han viajado verdad…? O si no nada más vean la nota roja de sus periódicos o noticiarios internacionales…

México, que se precia de ser un país en el que no hay discriminación racial, irónicamente es un claro ejemplo de todo lo contrario. Aquí sí que se discrimina a casi todo mundo, y a veces no tan veladamente y sí descaradamente: a los indígenas, a los mestizos, a los extranjeros, inmigrantes, pochos, miembros de la comunidad LGBT+, a éstos y a aquéllos (pónganle la denominación que quieran).

“Como te ven te tratan”, reza un dicho muy de aquí.

La acción se desarrolla en la Ciudad de México, pero los sets fueron recreados en unos estudios de cine de París. Las actrices han sido criticadas hasta el delirio, que si Selena Gómez es una vergüenza por no hablar el castellano correctamente, que no tenía ni idea que querían decir realmente sus parlamentos y así. Que si Zoé Saldaña (pronunciado Soi Saldana en inglés) no se escucha como capitalina (de la CdMx), ni como jarocha pero sí como colombiana (sólo le faltó terminar sus frases con el consabido “pana”). Que la actriz trans Karla Sofía Gascón es considerada por muchos como la mar de antipática aunque su actuación y su pronunciación “chilanga” sean verdaderamente notables; sin embargo, su “delito” es que sin ser una mujer biológica está nominada a un Óscar junto a la mismísima, portentosa y “sustanciosa” Demi 
Moore, que esta vez es la favorita de todos los que amamos el cine. ¡Por supuesto! Si acaso se la perdieron acá más abajo está mi artículo sobre La sustancia (Coralie Fargeat, 2024).


EMILIA PÉREZ Karla Sofía Gascón como Manitas y como Emilia está genial. © Page114/ France 2 Cinéma/ Pathé Films/ Saint Laurent Productions/ Netflix


En contraste, la realidad es que Emilia Pérez es una película de notabilísimos valores cinematográficos con una estética bastante bizarrra pero no por ello deleznable. La dirección de Audiard es para muchísimos lo más cuestionable, ¿pero qué se puede hacer con este reparto de señoras tan “raras”, siendo él mismo otro ser tan raro o más que ellas?

La dirección de arte es asombrosa; se tuvo un minucioso cuidado en retratar perfectamente todo lo mexicano: el vestuario, (con todo y todo) la manera de ser y hablar. Los escenarios y su decoración: desde el tianguis hasta las marcas nacionales en la tienda de conveniencia. Para hacerla más “verosímil” también hay secuencias grabadas en Ixtapaluca.


EMILIA PÉREZ La gran estrella del pop Selena Gómez (que ya ha sido actriz de Woody Allen) es injustamente criticada en esta producción. ¿Qué culpa tiene ella de no hablar bien el español? © Page114/ France 2 Cinéma/ Pathé Films/ Saint Laurent Productions/ Netflix


El soundtrack es muy original, dentro de lo cotidiano que podemos escuchar en la ciudad, porque una “cantaleta” tan familiar y chocante fue convertida en una pieza coral maravillosa, no lo podía creer… El número musical coreografiado a lo Lady Gaga en el Music Hall de la Srita. Gómez es inenarrable e inclasificable. Como nota de color puedo añadir que la letra se parece a Quiero ser santa grabada por Alaska en el siglo pasado, pero con un look a lo Blondie/ Debbie Harry (y de veras que se le parece mucho).

El arte y las demás creaciones de los artistas siempre estarán bajo el escrutinio del público, conocedor o no, y su veredicto, podrá ser asertivo o no. Las apropiaciones culturales han abundado en todos lados y sobre todo en muchas obras artísticas prodigiosas, recordad Madama Butterfly de Puccini que retrata el mundo de una geisha japonesa desde el punto de vista italiano (que sepamos Puccini jamás fue al Japón) o el desfile de moda inspirado en los trajes rusos de Yves Saint Laurent que lo llevó al estatus de celebridad mundial en 1976. El mismo posimpresionista Gauguin pintó a sus aborígenes tahitianas que asombraron al mundo, con la diferencia de que él si vivió allá. 

Hollywood, y otras cinematografías, siempre han filmado sus propias versiones de historias que tienen lugar en países extranjeros, nada más vean todas las historias de vampiros de Transilvania filmadas en Columbia Pictures o en los Universal Studios. Si vamos más allá ¿recuerdan los spaghetti westerns de Sergio Leone, por ejemplo? Nadie en su sano juicio se atrevería a criticar o a descalificar semejantes obras.

Así que en ese Hollywood tan acostumbrado a sus historias exóticas los miembros de la Academia han nominado a Emilia Pérez nada menos que en 13 categorías. El filme técnicamente es perfecto, y sí, sí que tiene grandes valores artísticos, aunque nos caiga mal… En el Festival de Cine de Cannes ya fue multipremiada. Ahora sabrá Dios qué va a pasar el 2 de marzo en el Dolby Theatre.

Cada quien tenemos gustos y puntos de vista diferentes. Véanla y formen su propia opinión. Les guste o no hay que verla… después de todo sólo es una película. 

¡Corte y queda…!

MarcH de Malcriado